En mi lista

junté todo aquello (en un ataúd guardo tu tacto…): las cartas, la sangre estancada, el pozo de incertidumbres, la ceniza de cada una de mis muertes hice una hoguera (porque todo arde si le aplicas…) cada herida, cada daño y grito ahogado, cada fantasmagórica presencia, fueron alimento para este fuego que la noche verá prender […]